Para acabar con una mala racha...
Receta de las hierbas aromáticas
En qué casos la utilizo:
Estoy pasando por una mala etapa en la que no me sale nada bien.
Quiero protegerme de los malos influjos.
Últimamente tengo muy mala energía.
Qué necesito:
Un mortero, mejor si es de bronce.
Un puñadito de malva.
Un puñadito de ruda cortada en trocitos.
Unas hojas de tomillo.
Unas hojas de laurel.
Medio vaso de alcohol de 90.
Un pergamino o un trocito de papel blanco.
Algo que pinte en color verde, ya sea una pluma de ave, un bolígrafo o una estilográfica.
Para comenzar, escribe en el pergamino o en el papelito la siguiente oración:
"Santísima Trinidad, Padre, Hijo y Espíritu Santo, que el mal que alguien me está deseando no tenga acceso a mí (se nombra a la persona con nombres y apellidos), y que los malsanos deseos que otros seres me producen se alejen de mí (se repite el nombre de la persona), de mi mente y de mi vida. Y que nunca jamás vuelva el mal a penetrar en mí. Amén."
A continuación, dobla cuatro veces el papelito y ponlo dentro del mortero. En el recipiente introduce los demás ingredientes de la receta y muévelo todo muy bien.
Mantén esta mezcla dentro de tu casa durante 27 días, más o menos. Cuando sea Luna creciente, una vez transcurrido este tiempo, tienes que tirarlo todo a un río o al mar, menos el mortero, y repetir lo siguiente:
"Por el ritual que he realizado al vaciar este contenido a las aguas del río o del mar, pido la celestial bendición para mi persona (se dice el nombre de la persona) y que las malas influencias no me afecten más ni en mi salud, ni en mi mente, ni en mi bienestar. Y que la maldad de mí desaparezca y me purifique para siempre. Amén".
Con esto termina el ritual y la persona queda totalmente limpia de malas energías.