Hola a tod@s. Soy una chica de 24 años recién cumplidos. Hace exactamente 6 años me enamoré por primera y única vez en mi vida de una persona que había conocido 4 años atrás, y que si bien no me había llamado la atención, siempre sentí que sería importante en mi vida. Alguna extraña intuición me lo indicaba. Hasta entonces sólo fuimos amigos, muy buenos amigos, pero únicamente eso. Absolutamente nada más.
Como digo fue pasando el tiempo, y 4 años más tarde, cuando aparentemente cada ujo iba a coger su propio camino profesional, un cambio de papeles en el último momento lo llevó a venir por el camino que yo había elegido. Desde entonces siempre he tenido muy claro que el destino nos une, y lo noto a cada momento. Además eso es algo que yo misma siento.
Por ese tiempo yo fui dándome cuenta de lo que sentía por él, que no era aquella amistad, era mucho más que eso. Hubo varios detalles, y comprendí que yo estaba enamorada de esa persona.
Sin embargo, como en todo cuento de hadas, hay brujas. En nuestra historia también, y muy malas. Brujas (en este caso, compañeros y compañeras suyos) que se propusieron alejarnos mutuamente. Mintieron lo que quisieron, inventaron de todo, y sí, durante un tiempo nos alejaron. Mejor dicho, tuve que ver cómo él se alejaba de mí y era manipulado (y él se dejaba manipular, por supuesto). No será necesario decir lo mucho que sufría yo cada vez que nos cruzábamos y era como si no nos conociéramos; cuando él huía de mi cercanía, cuando no podíamos ni dirigirnos la palabra.
No obstante, nada es eternamente malo. Las mentiras cayeron por su propio peso. Una vez intenté hablar yo con él, ya que él tuvo ciertos gestos de acercarse a mí, a escondidas, y yo le dije que no entendía su comportamiento y que me dolía mucho. Él no quiso ser muy claro conmigo, pero me dejó constancia de que simpre podría decirle lo que fuera a él, independientemente de todo lo que sucediera alrededor.
Actualmente, ya no está con esos compañeros; ahora está solo. Hace un año le confesé mis sentimientos por mail, pero no recibí respuesta alguna. También es cierto que yo no le pedí respuesta. Seguimos alejados, con mucha tensión, casi sin mirarnos. Él rehuye bastante el mirarme a los ojos; pero cuando sucede, se nota una magia muy especial. De hecho, hace 6 meses falleció mi madre, y él cuando se enteró manifestó su deseo de venir al funeral, aunque finalmente no vino, también por gente que se metió en medio.
Concretamente, hace 1 semana, él se las arregló para venir a mi grupo de trabajo, de improviso, y tuvimos una complicidad especial; fue como volver al pasado, a los buenos tiempos.
Ahora me planteo volver a recordarle mi sentimientos, pero esta vez en persona.
No se qué opinan al respecto, de eso y de toda la historia en general. A mí personalmente me parece una historia preciosa.
Muchas gracias por leerla.
Un beso a tod@s.