La separación de una pareja es uno de los sucesos mas estresantes y difíciles de superar. Hoy quiero compartir algunas reflexiones que espero los ayude a sanar las heridas del corazón para que puedan pasar la pagina en algún momento de la vida.
Mientras escribo, pienso que realmente la única medicina que puede calmar el dolor de una ruptura sentimental es: El Tiempo. En el momento en que te encuentras en el ojo del huracán... afectado, no hay palabras ni comentarios positivos que puedan serenar tu ansiedad mucho menos calmar tus emociones, especialmente si fuiste la persona a la que dejaron. Con el tiempo, descubrirás que te sucedió por una buena razón... Pues, todas las situaciones que vivimos encierran una enseñanza.
Pero no me gustaría que recuerdes una vez mas, todo lo que has vivido... pues ya, forma parte del pasado!!! Te sugiero que distraigas tu mente y que por unos minutos te desconectes de la preocupación, el miedo y la rabia que puedas sentir en este instante. ¡Este, es el momento de sanar!!! Abre tu corazón y tu mente para que puedas dar los pasos necesarios para sanar tus heridas y recuperar la serenidad y la claridad mental que te permitan continuar con tu vida. Vamos, yo se que ha sido intenso y difícil, pero hagamos juntos una reflexión: tu también fuiste participe activo de la relación, tomaste decisiones importantes, asumiste responsabilidades con las que cumpliste, llegaste a ser independiente antes de estar comprometido o durante la relación... ¿Entonces como puedes perder el manejo y el sentido de tu vida tan fácilmente? ¡Siempre puedes volver a comenzar!!!
Eres una persona muy especial... Estoy segura que en algún lugar, hay otra persona especial, esperando el momento de encontrarse contigo para compartir la vida.
Herramientas:
NO PIENSES TANTO. Deja de darle vueltas en tu cabeza a lo que pudiste hacer que ya no hiciste. Solo vale la pena si aun estas a tiempo de evitar la separación, en cuyo caso es indispensable que tu pareja este de acuerdo. No le permitas a tus pensamientos que te lleven a recordar los detalles tristes. Distrae tu mente.
VIVE TU DUELO. Es natural que te sientas herido y dolorido, en realidad acabas de experimentar una perdida. Hacerte el fuerte y aparentar que no has sentido nada puede llevarte a guardar y reprimir emociones negativas que mas tarde se devuelvan contra ti. Te sugiero que las dejes salir.
COMPARTE CON UN BUEN AMIGO. Muchas veces hablar con alguien que se muestre interesado en nuestra historia, puede ser muy terapéutico, pues nos ayuda a liberar un poco de la carga que llevamos por dentro. Evita contarle a mucha gente acerca de tu situación para que el comentario negativo de ellos no aumente tu tensión.
NO BUSQUES CULPABLES. Mientras mas insistas en sentirte culpable por lo que paso, o en hacer culpable a tu pareja, lo único que lograras será aumentar tu malestar. Piensa que en una relación de pareja, ambos somos parcialmente responsables de lo que vivimos. Trátate con gentileza.
NO GUARDES ESPERANZAS. Muchas veces, la razón por la cual el dolor te acompaña por tanto tiempo, es porque en el fondo de tu corazón todavía conservas la esperanza de que esa persona reconsidere su decisión o revise su comportamiento y regrese. Es preferible soltar... si esa persona es para ti, regresara en otras condiciones.
NO TENGAS MIEDO. Recupera la confianza en ti mismo. Reconoce tus capacidades y al mismo tiempo recuerda que dentro de ti, se encuentran las herramientas necesarias para superar esa situación por mas difícil que sea. ¡Tu puedes salir de ahí!!!
Pregúntate: ¿Que puedo aprender de esta situación? Y con mucha suavidad, permítete aprenderlo.
PERDONA. Aunque te parezca muy difícil de hacer... en el momento en que te sientas mas fortalecido, llénate del amor que sientes por algunos de tus otros seres queridos y perdónale. Vamos, mereces ser libre, para que puedas abrirte de nuevo a recibir los regalos y las oportunidades que La Divinidad tiene para ti.
No hay formulas mágicas que nos eviten afrontar el problema para poder superarlo. Estas son algunas de las muchas herramientas que pueden apoyarte a reunir la fortaleza, el valor, la fe y el animo para levantarte y comenzar de nuevo. ¡ Adelante!!!