Él géminis; ella capricornio (parte three)

Las cosas a veces no son como son, son como parecen. Aunque también ésta afirmación me la podría discutir alguna capricornio, no sin sus sólidas argumentaciones. Todo es cuestión de perspectívas. Pero perspectívas a parte, lo que siempre hay que agradecer a éstas mujeres es su sinceridad. Tendrán otros defectos, como todo hijo/a de vecíno, pero no falsedad, a mi modo de ver. Pueden esconder sus inseguridades y vaivenes emocionales con su porte seguro e impertérrito ante la vida, y de hecho lo hacen bien. Géminis lo hace a su manera si lo pensamos bien, ya sea a través de la palabrería, o distrayendo tus ojos mientras él salta de farola en farola recitando versos de García Lorca. Spiderman? Que va...

Ella un dia le díce a él que no sabe lo que siente, que tiene dudas, y que no quiere hacerle daño, que no quiere que se haga ilusiones. Él se hace el sorprendído, pero en realidad estaba medio preparado. Dígo medio, porque nunca se está lo suficientemente preparado para palabras así. Pero ella corre rápidamente a decírle que pueden seguír siendo amigos, y seguír quedando para salir como siempre. Entonces él, ingenuamente, le pregunta a ella qué siente. Ella, sin despeinarse, le responde que siente mucho cariño por él, que le parece muy atractívo y que siente una química mental enorme, pero que le falta algo. Que le quiere muchísimo. Ojo con el uso que hacemos de la palabra querer jajaja porque a veces da pie a malas interpretaciones.
Él está dolído, tocado y hundído, y mirarla a ella a los ojos se le hace una tortura indeíble. Entonces ella le toca el brazo y le dice que no se preocupe, que seguro que encontrará a alguien a su medida. Él, aún a sabiendas que no debería decírlo, contesta que sólo la quiere a ella. Pero el silencio que ella mantiene le hace creer a él que no hay vuelta atrás.

Entonces comienza un espectáculo sin precedentes. Quedan como amigos. Pero un tipo de amistad un poco extraña...
Él lógicamente asume que tiene poco que hacer, pero su otro gemelo le levanta por los hombros y le dice, si, queda poco, pero aún queda algo!!!
Las vidas de ambos se mantienen con normalidad diaria. Él ya no la escribe tanto como antes, pero el mensajito de rigor de buenos dias y buenas noches cae siempre. Ella los responde sin falta y muy a su estilo capricorniano. Si él tarda en escribir, ella le envía alguno. No se agobian a mensajes el uno al otro, pero ningún dia queda sin ellos.
Incluso ella a veces lo llama a él, sobre todo por la noche, para saber qué tal ha ído su dia. Incluso le sigue pidiendo ayuda y opinión con asuntos laborales. Él, por supuesto que la responde encantado siempre a sus peticiones de ayuda, pero sin parecer demasiado obvio jajaja.

También siguen quedando cada sábado, religiosamente, para tomar algo y hacer cosas juntos. Ella se ríe de él y hace bromas, él se las devuelve, ambos se pican y ambos se ríen. Juegan al billar y ella se esfuerza por ganarle. Visitan lugares, y ella escucha silenciosamente las explicaciones de su guía, que siempre tiene historias interminables que contar. Ven tiendas, y ella le píde consejo sobre ropa. Él se la da, siempre soltando alguna perlíta que le suba el ego a ella jajaja. Él le dice a ella a veces lo guapa que está o lo bien que hace ésto o lo otro.
Ella le devuelve el piropo.

A veces él le cuenta que hay alguna que se le ha declarado, o que sospecha de alguna. Ella a veces como si no ocurriera nada malo, le dice que pruebe suerte con la chica en cuestión, que alomejor es el amor de su vida. Pero él no tarda en dejar zanjado que no va a jugar con nadie, y que siempre será fiel a lo que sienta.
Otras veces, ella le pregunta tranquilamente que pasó con aquélla chica. Se muerde las uñas mientras mira al infinito y espera la respuesta de él. Él tranquilamente responde que ésa chica no tiene nada que hacer.

Caminan por la calle. Ella va siempre agarrada de su brazo, o apoyada en su hombro. Él a veces le hecha algo de cara y le pasa la mano rodeando su cintura con sigilo, con suavidad, alternando miradas intensas. Ella no se queja. A veces él le da un beso sobre sus cabellos negros, y ella, o no dice nada, o riendo le dice que la va a dejar sorda jajaja.
Vísto desde fuera, verles juntos por la calle pareciera que son una pareja. Los relaciones públicas o los comerciales que te paran para venderte por la calle siempre les dicen, oiga pareja les interesaría...?. Entonces él riendo le dice a ella que le parece gracioso que los tomen por pareja cuando no lo son. Ella sólo dice que si. Entonces él le vuelve a echar un poco de cara y le dice que harían buena pareja. La hija de saturno contesta que si, que harían buena pareja... Pero él en seguída corre a crear sonido entre los dos, argumentando que sus hijos saldrían muy guapos, sobre todo por su madre jajaja. Ella se ríe a carcajadas.

A veces él la acaricia suavemente el brazo, la espalda, o le besa la mano, pero sin sobrepasarse. Ella no se opone, al menos abiertamente. Pero él no abusa del toqueteo. Quiere crear sensaciones, pero quiere que ella los extrañe también.
Cuando están cenando, a veces él la mira con descaro. Entonces ella le pregunta qué pasa? Y él la contesta con una burla o diciéndola que no la estaba mirando a ella, sino a alguien o algo que había detrás, y que no sea tan egocéntrica jajaja. Entonces ella se queda sin respuesta y sonríe, o le contesta un simple vale con una burla.

Normalmente sus saludos y despedídas son dos besos y un abrazo fuerte. Alguna vez ella se deja llevar por la mirada clavada de él, y le da un beso corto en los labios, o dos, o tres. Entonces él pregunta, y ése beso? Ahh bueno, un beso de amigos, y sonríe. Entonces él, educadamente y sonriente, replica que no le de ése tipo de besos, porque si no él puede imaginarse que ella siente algo más, y ella había dejado bien claro que no quería hacerle daño, verdad? Entonces ella se queda un instante callada, y acto seguído le dice, vale, está bien lo siento, y vuelve a sonreír.
Tras despedírse, tras largo rato, se van separando lentamente, mientras ambos mantienen sus manos en contacto el uno con el otro. Se van alejando en direcciones opuestas, pero siempre mínimo una vez, se dan la vuelta para observar cómo el otro se va alejando. A veces ambos coinciden y se dan la vuelta a la vez, y al verse que se han pillado mutuamente mirando al otro, sonríen.

Y asi, día tras día...
Qué pasará? Quién sabe...