Si la comparto
...cuando me siento decepcionado con las personas, cuando creo que he dado mucho por algún amigo o amiga y no soy correspondido...me alejo poco a poco, sin llamadas, sin reproches, despareciendo en la niebla para siempre, y surge nuestro extremo en el que damos toda nuestra frialdad y nuestro silencio en su presencia acompañado de nuestra mirada inquisitorial. No es justo lo que el escorpión da con lo que recibe. A veces ya me siento correspondido en mi mismo con mi manera de ser, es decir, sin esperar nada a cambio, como si fuera mi filosofía de vida, pero llega un momento, cuando estoy en horas bajas, que me digo "no es justo, no es justo" te di toda mi vida y sólo recibí indiferencia.
Tengo un amigo, o tenía, que me llamaba muchisimas veces para charlar, tomar algo y contarme sus problemas. Era agónico. Pero dada nuestra naturaleza intutitiva soportaba horas y horas de sus lloros. Sólo un día le llamé para contarle los míos, y al poco rato cortó la llamada diciendome luego te llamo y seguimos. No lo hizo. Jamás me volvió a preguntar qué era lo que me ocurría. Esa amistad se está diluyendo. Ayer lo vi, estuvimos todos juntos y le apliqué (sin querer de veras) la más fría de mis indiferencias por un tipo además que en el amor ha perdido toda la dignidad con su ex y me produce asco ver cómo una persona se rebaja de esa manera por reconquistar desde hace un año un amor acabado. En fin, desaparecemos consciente o inconscientemente para hacernos valer y por que esa situación en cuestión, o esa amistad, realmente no se la merecen.