MEDITACIÓN PASO A PASO
Ubíquese en un lugar donde este tranquilo, en silencio. Puede vestirse de blanco y poner la imagen de algún santo o Buda. Si lo hace, colóquele una ofrenda floral.
Puede ayudarse con una vela de color cobre, blanca o plata. Además de incienso de loto o de flores silvestres y música de tambores para conectarse más con la energía de la tierra. También puede usar una gema o piedra de la Luna.
Para comenzar, siéntese con los pies tocando el suelo. Luego entre en sintonía usando la respiración y visualice que a sus lados están todas las personas que usted quiere y estima. Luego, frente a usted, ubique a aquellas con quienes no tiene una buena relación.
A continuación, dedique sus buenas intenciones a los enfermos, a su familia o a quien usted quiera. Luego comience a inspirar y expirar, concientemente. Dedique tiempo a hacer que la respiración no sea algo mecánico sino que una acción donde sienta como el aire entra por su nariz y llena sus pulmones, oxigenando su cuerpo. Hágalo varias veces hasta que note que está con su mente alerta y su cuerpo relajado.
Visualícese en un lugar con aire limpio, en el que sienta mucha paz. Tome conciencia de que el lugar que ha elegido está en la Tierra, así logrará unir su energía con la del planeta. A continuación, imagine que sobre su cabeza hay una poderosa luz dorada que ingresa lentamente por el centro de su cabeza y va bajando por todo su cuerpo. Esta energía sale por sus pies y entra a la tierra y a continuación, se transmuta para subir desde el centro de la tierra por sus pies y su cuerpo hasta el chakra crístico. Desde ahí logra irradiar todo a su alrededor. En este momento, comprométase a ser generoso, compasivo, pida por la paz en su corazón y en el mundo.
Una vez terminada la meditación coloque la gema o piedra de la luna en un bolsito plateado y llévelo con usted. Esta gema le recordará en todo momento su compromiso.