En respuesta a matea_6498592
Chicas, si quieren formalizar con un Tauro, no intenten razonar con él verbalmente. O, vamos, no sean obvias de modo que les resulte incómodo, por favor. El gran error que cometen cuando quieren conquistar a un toro, es ése. Si hay algo que molesta a Tauro es que quieran engancharlo a como dé lugar, y si ha de poner en balanza cerebro y corazón, va a decidir por cerebro. Si van a eligir caminos como tenemos que hablar, pues ya saben a qué se atienen. Hay que tener tacto para ese tipo de cosas, porque como ya he dicho, puede elegir por el cerebro y hacer uso de su cualidad más destacable: la desaparición.
A Tauro debe hablársele, para la seducción, con lenguajes no muy claros: sonrisas, alguna llamada por teléfono. Para Tauro hay una diferencia grande entre el Amor y el Mundo. No es conveniente que hables con él de amor, del modo que hablarías sobre política. Tauro es adicto a las demostraciones de amor por mínimas que sean. El que te acuerdes de él, de tanto en tanto, es potencial para conseguir sus afectos y el que despiertes en él la curiosidad y sensación de reto, es importante. Pero no abusen porque sólo van a conseguir que se aburra o que se sienta invadido.
Es cierto que a Tauro le gusta la seguridad, pero no a nivel como se cree comúnmente. Es bastante romántico e irle con las cosas muy claras, le abre a brincarse todo el proceso del romantiqueo antes de la relación para pensar en cómo será la relación en forma, y si le asusta lo que ve en sus visiones... insisto, pues ya saben. Es importante tener paciencia para conquistar a un Tauro y como digo, no se tan obvios, para que no se oponga y cuando llegue el momento de formalizar ni siquiera se lo piense y simplemente de el salto.
Jajaja!
Muchas gracias 21mml!
Así que nada de escenitas de esto es lo que hay, lo tomas o lo dejas... Porque lo más seguro es que lo vaya a dejar!
A ver si con esta aclaración los entendemos mejor!!!
Lo malo es q tanta duda desanima un poco...
En fin, seguiremos apostando, a mí de momento aún me merece la pena.
Está un pelín serio o distante estos días, lo dejaré estar y ya veremos por dónde pita!
Besos