En respuesta a an0N_978506399z
Yo tomo decisiones (precipitadas o no)
cuando estoy convencida que debe ser así, pero pasa un tiempo (minutos o semanas) y encuentro otras variables, recuerdo otras vivencias, interpreto señales, y pienso que debe ser de otra forma, y entonces ahí tomo otra decisión... tal vez la opuesta. Pero no es contradicción, no es mentira... el punto es, y eso es lo realmente importante, que la esencia sigue siendo la misma.
Por ejemplo: si quiero a alguien y pienso que no me quiere entonces tomo la decisión de dejar de intentarlo, pero puede que me de cuenta de ciertos detalles en los que antes no habia reparado y pienso que soy una tonta y que si me quiere, entonces tomo la decisión de seguir intentando. La esencia? querer. Ahora bien, si no quiero, ni siquiera tomo la decisión, simplemente no quiero.
un abrazo
Aha...
Gracias por tu respuesta!
Entiendo que la esencia no cambia y es la misma...
El tema es el mismo vaya, eso esta claro, pero lo que intento comprender es como dentro de un mismo tema un día podéis decir blanco y al siguiente negro, y volver al blanco en 5 minutos, y luego un negro manchado de blanco a la semana, etc.
Pq. como he dicho en otro post creo, entiendo que en las cosas puedan haber cambios, faltaría más, pero tan radicales, o a veces tan rápidos, o a veces mostrar en actos una cosa y con palabras todo lo contrario... me sorprende y eso es lo que quiero llegar a entender, y en concreto en el campo de las relaciones de pareja.... que des del punto de vista del otro lo percibimos como indecisiones, cambios, medios, etc.