El otro día estaba con una amiga, y se nos acercaron varias gitanas. Una de ellas me preguntó mi nombre, y me dio una rama de romero. La otra le dio una rama de romero a mi amiga, pero no le preguntó nada. Empezaron a leernos la mano, por separado, y al terminar me pidieron dinero. Yo me negué pues eran muchas y no quería abrir el bolso con ellas allí. Entonces, tras insistirme, me preguntó que si era del centro de la ciudad, me miró la que me había leído la mano fijamente, y me dijeron que no podía escuchar lo que le decían a mi amiga. Al irnos, dijeron que guardásemos el romero una semana y después lo quemásemos, pero nosotras lo dejamos por ahí. Hablando con ella después, me dijo que había hecho mal por no haberles dado nada, pues era peligroso. Ella les dio algunas monedillas.Opiniones?