Quizá te ha pasado que sientes cierta densidad o negatividad en algunos lugares específicos de tu casa y lo más probable es que hayas pensando que alguien te ha echado algo encima o que por alguna misteriosa razón tu casa está cargada. Sea como sea y antes de asumir que existe un embrujo sobre ti y prepararte para un ritual de limpieza espiritual, es importante que te hagas las siguientes preguntas:
1 - ¿El lugar contiene objetos relacionados a eventos de tu pasado que te resultan dolorosos? ¿Han sucedido en ese lugar cosas dolorosas para ti?
Muchas veces las personas mantienen fotografías, libros o prendas de vestir que pertenecen a personas que ya no están o con las cuales no se tuvo una historia positiva. Tu mente puede estar rememorando esas situaciones al observar o sentir inconscientemente la presencia de estos objetos en tu entorno físico o al estar en sitios en dónde no has tenido buenos momentos.
2- ¿Cómo te sientes actualmente?
A veces, no es que exista una energía negativa en el sitio: lo que sucede es que tú estás mal anímicamente y eso parece traspasarse a tu entorno, haciéndote ver todo nublado y poco vibrante.
3 - ¿Tienes un exceso de cosas en el lugar o el sitio está sucio?
Está comprobado que los lugares llenos de cosas o desordenados tienden a estresar o producir estados de ánimo alterados. Esto sucede porque tu mente trabaja, literalmente, captando información de su entorno, por tanto resulta comprensible que un dormitorio o un despacho lleno de cosas por todos lados no te relajará tanto como uno limpio, sencillo y ordenado, en dónde tu mente y tus ojos tendrán menos estímulo [menos focos de atención en los que ocuparse].
Finalmente, recuerda que en la mayoría de los casos existe una justificación racional para ciertos malestares físicos, energéticos o espirituales. El problema es que no estamos habituados a prestar atención y estudiar todas las variables del entorno que podría estar reproduciendo el evento o situación incómoda. Es importante, además, aprender a hacer una revisión interna constante de nuestro estado anímico, para diferenciar aquello que se produce por nuestra propia influencia energética de lo que se produce por elementos totalmente ajenos y externos a nosotros.
Quizá este fin de semana sea el momento preciso para limpiar y ordenar aquellos sitios que necesitan de tu atención. Esta sería una forma de renovar tu propio entusiasmo, también.
[Aquarian Tarot]