Las personas Virgo son normalmente menudas, nunca gigantescas, pero musculosas, y están dotadas de mucha mas fuerza de lo que da a entender su apariencia de fragilidad. Son capaces de aguantar un trabajo más intenso, y durante un tiempo más largo que gente regida por signos más fuertes y recios... siempre que durante esa actividad puedan evitar un colapso nervioso. Por más que exteriormente se muestren capaces y serenos, su angustia interior les carcome, alterándoles la digestión y el equilibrio emocional. Lo que se oculta tras los nervios destrozados de más de un Virgo es esa tendencia a aceptar mas trabajo del que pueden hacer sin riesgo, y después esforzarse hasta no poder mas para cumplir con los compromi-sos asumidos. Son gente nacida para ser tranquila y apacible, cuando sus complejos y delicados mecanis-mos funcionan sin problemas y sin que la fatiga cerebral trabe los engranajes.
Son incuestionablemente gente confiable y sincera, pero sin embargo, son capaces de fingir una en-fermedad cuando no quieren hacer algo o ir a alguna parte. En esas ocasiones, pasa a primer plano su talento latente de actor. Ocasionalmente, consiguen auto convencerse de esas enfermedades imaginarias, pero el ojo frío y la cabeza despejada de la gente regida por Mercurio hacen que la mayor parte de tales autoengaños sean de vida breve. Son minuciosos y pulcros en su arreglo, sus comidas, su trabajo y sus romances. ¿Tu prolijo amigo Virgo da la impresión de que acabara de salir de la ducha? Pues probablemente es así. Se baña o se ducha con más frecuencia que tres o cuatro de tus amigos de otros signos, todos juntos. También tiene ideas muy precisas sobre la salud, poca paciencia con la haraganería, y se hace muy pocas ilusiones sobre la vida y la gente, aun cuando esté enamorado. Sea hombre o mujer, un romance jamás tiende ante los ojos de Virgo un velo tan espeso que le impida ver las maculas e inconvenientes de la relación o de su pareja. Para decirlo con una expresión popular, los de este signo <<saben bien donde pisan>>, aunque al Virgo amante de la corrección del idioma le disgusten estas frases.
Claro que no debes formarte la idea de que toda la gente que nació a fines de agosto o en septiembre es remilgada, quisquillosa y dogmática. Son muchos los Virgo que muestran un inteligente humor mercuriano si atiendes a sus observaciones al margen e irradian un especial encanto mercuriano muy difícil de resistir. Con decir que Sofía Loren es Virgo, creo que ese punto ya queda resuelto de una vez por todas. Tal vez te encuentres con algún Virgo que ande tan ocupado manteniendo limpios y en orden los rincones de su mente que se haya descuidado en cuanto a su vestimenta o a su ambiente, y eso puede despistarte en el primer momento. Pero espera, que tarde o temprano le verás recogiendo un alfiler de la alfombra, cepillándose el pelo o sacándose una hilacha del hombro.
Aunque suenen muy pocos sueños imposibles, es frecuente que Virgo presente un rasgo incongruen-te: parece un fascinante soñador, como Si estuviera envuelto en ese mismo arco iris en el cual su mentali-dad lógica se niega a creer.
Cuando se sienten molestos por la vulgaridad, la estupidez o el descuido, los nativos de Virgo pueden ponerse súbitamente hoscos, irritables, gruñones y nerviosos, pero por lo general son gente muy dulce, muy grata de tener cerca, especialmente en un cuarto de enfermo. Algunas de las mejores enfermeras, llenas de eficiente compasión y modelos de pulcra capacidad, han nacido bajo este signo. Cuando te duela la cabeza, lo más probable es que sea tu amigo Virgo quien corra a la farmacia. Y si estás en casa de él, no necesitará ir muy lejos, porque probablemente allí mismo tendrá una farmacia en miniatura. En el cuarto de baño, el botiquín estará cargado de remedios para el dolor de estómago, el estreñimiento, las afecciones hepáticas o la acidez. Échale un vistazo alguna vez. Virgo jamás tomará una medicina a menos que conozca todos sus componentes y sepa como actúan, de modo que podrá decirte con total conocimiento de causa que será mejor para tu dolor de cabeza, según que sea lo que lo haya causado. Cuando viaja, es frecuente que lleve consigo la farmacia portátil; hasta puede llevar un maletín de mas, solamente para frascos y píldoras, y si está acostumbrado a determinada marca de jabón o de colonia, pues también irá al maletín. Sería un desastre para Virgo quedarse varado en una ciudad donde no vendieran lo que está acostumbrado a usar. Generalmente, compra los jabones y artículos de tocador por cajas, porque sale más barato o en todo caso, por docena, y esa es otra de las razones de que no le guste comprar cosas cuando viaja. Hay casos en que un nativo de Virgo llega a viajar con su propia provisión de agua. No te rías... ¿no sabes lo que puede pasarle al estómago de una persona cuando ciertos cuerpos extraños se introducen en el sistema digestivo, suspendidos o disueltos en un agua desconocida? Pues Virgo puede decírtelo. Son gente que cuando tiene hábitos, pues tiene hábitos, y salir de vacaciones o hacer un viaje de negocios no es excusa para romperlos. Si en casa Virgo está acostumbrado a guardar los calcetines en el cajón del medio de la cómoda, a la izquierda, allí irán los calcetines en la habitación del hotel. Y si es una de esas cómodas que no tienen más que tres cajones grandes y no puede optar por el de la derecha o el de la izquierda, pues ya tendrá para cavilar un rato. Es posible que termine por dejarlos en la maleta, pero no dormirá tranquilo. A la mañana siguiente, la camarera del comedor del hotel aprenderá inmediatamente que si Virgo dice que quiere los huevos pasados por agua tres minutos, no quiere decir que dos minutos cuarenta y cinco segundos. Y que pedir las tostadas bien hechas no significa quemadas. Además, la atención que presten a esos detalles influirá decididamente sobre las propinas.
Continuara...