A los nativos de Leo les encanta dirigir y deslumbrar. Es apasionado, voluntarioso, sincero y fiel. También es orgullo y tiene tendencia a la exageración. Y es que todo es poco para este signo de fuego regido por el Sol.
En cuanto a la salud, a Leo le gusta parecer siempre que está genial, así que si surge cualquier contratiempo intentará esconderlo, no tener que contarlo. Ahora bien, también puede darle por exactamente lo contrario, es decir, dramatizarlo hasta tal extremo que parezca mucho más grave de lo que es. Todo depende de como les de por reaccionar.
Sus puntos débiles son:
- El corazón, pues al tomarse todo a la tremenda suele sufrir palpitaciones.
- El sistema vascular, pues como tiende a los excesos cuida poco su dieta.
- La tensión arterial, pues al ser nervioso suele padecer de tensión alta.
- Leo ascendente Aries: Este sujeto posee tanta vitalidad que puede incluso llegar a manifestarse como agresivo y colérico. Sus problemas de salud suelen ser como su carácter, tempestuoso, pues tan pronto vienen como se van. También tiene tendencia a padecer de migraña.
- Leo ascendente Tauro: Este nativo es especialmente voluntarioso, fuerte, eficiente y poderoso. Eso sí, su punto flaco será el exceso de peso debido a su tendencia a engordar. Sus enfermedades generalmente estarán relacionadas con la glándula tiroides y el corazón.
- Leo ascendente Géminis: Esta conjunción puede dar lugar a un sujeto que quiere hacer en todo momento lo que quiera y con una extraordinaria capacidad para cambiar de objetivo. Y como, generalmente, se saldrá con la suya, no sufrirá ni trastornos psíquicos ni psicosomáticos. Eso sí, tendrá dolores del exceso de movimiento, aunque nada grave en el fondo.
- Leo ascendente Cáncer: Este nativo tiende a padecer épocas de trastornos digestivos y cardíacos que dan pasos posteriormente a periodos en los que está estupendo y lleno de vida. Y es que no es constante en su cuidado personal, pues alterna el seguimiento estricto del régimen o tratamiento con momentos en que abandona cualquier norma.
- Leo ascendente Leo: Al ser un Leo puro sufre más que ninguno en los puntos débiles de su signo. Además, suele guardar silencio cuando se pone enfermo y sufrirlo en soledad. Es conveniente que las personas que están cerca de él lo vigilen o puede que no lleguen a notar que tenga serios problemas de salud.
- Leo ascendente Virgo: Hipocondríaco a causa de esta ascendencia, este Leo exagera tanto que cualquier alteración le parece un síntoma de una grave enfermedad. Es mejor que se mantenga alejado de las revistas de medicina o sufrirá inútilmente.
- Leo ascendente Libra: Este sujeto debe cuidar especialmente de su alimentación pues tiende a padecer hipertensión, colesterol alto y problemas en las piernas. Es de suma importancia que cuide su dieta.
- Leo ascendente Escorpio: En este caso suelen aparecer depresiones en caso de estar enfermo pues estos nativos tienden a desconfiar del médico. Además, se exigen mucho a sí mismos, incluso en cuanto a salud y resistencia física.
- Leo ascendente Sagitario: Con esta ascendencia se padece, sobre todo, de la circulación y del hígado. Debe vigilar también lo que come pues este Leo se intoxica con facilidad.
- Leo ascendente Capricornio: Aquí lo que más sufre es el equilibrio psíquico, y como efecto colateral la salud, pues la deja de lado al descuidarse. Las vértebras de la espalda, quizás por esa posición característica del que anda cabizbajo, también suelen resentirse en este sujeto.
- Leo ascendente Acuario: Aunque en cuanto a humor y relación con los demás es esta una buenísima conjunción, no es así en lo referente a salud, pues Acuario, que tiende a no tomarse en serio lo que le ocurre y vive en su propio mundo, empuja a Leo a rechazar cualquier tratamiento que se le trate de imponer. Su punto más débil serán sus piernas, por lo que debe caminar todo lo que pueda.
- Leo ascendente Piscis: Este Leo afectado por Neptuno es un paciente complicado pues suele encontrar su propia versión de lo que le ocurre y buscar la solución en métodos diferentes a la medicina tradicional, incluso en el campo de la magia. Ahora bien, este ascendente también le aporta cierta tranquilidad que evita que el regido por el Sol se mueva en exceso y sufra accidentes inesperados.