Después de dedicar un buen rato a leer este foro me he animado a dejar mi historia aquí.
Conocí a un tauro a muchos km de mi ciudad, al poco tiempo intimamos y después de pensar si daba el paso de ser mi pareja, se decidió. Y en poco tiempo me propuso que me fuera a vivir con él (esto no lo había hecho tan rápido nunca con ninguna de sus ex, pero pensó que era lo que sentía conmigo y valía la pena arriesgarse). Yo no tenía problema en desplazarme a vivir con él, así que iniciamos una relación. A mediados de este año (aproximadamente) me iría a vivir con él. Hasta que ese momento llegara nos veíamos varias veces cuando pudiéramos (unos días en su casa, otros días en la mía), tal y como suelen ser las relaciones a distancia.
Al principio de nuestra relación él desconfiaba, tenía celos y yo empecé a tenerlos también. Entendí que era algo lógico en este tipo de relaciones y que cuando estuviéramos viviendo juntos todo eso desaparecería y podríamos estar tranquilos. Yo hacía todo lo posible por poder irme a vivir con él lo antes posible y al final le preparé una sorpresa: cuando volviéramos de un viaje que hacíamos con unos amigos, nos iríamos ya con todas mis cosas (que yo ya había dejado preparadas) a su casa a empezar a vivir juntos. Ya no haría falta que me esperara más tiempo. Pero en el viaje con amigos sucedieron una serie de situaciones que se malinterpretaron y a él le dolió mucho. Ya no pude darle la sorpresa de que ya lo tenía todo preparado para irme con él, ya que la sorpresa me la llevé yo: cuando estuvo más tranquilo me dijo que ya no quería continuar la relación, que no estaba tranquilo, que yo no le daba tranquilidad ni seguridad y que no había mostrado ningún interés por irme a vivir a su casa, que sólo le daba largas Se fue.
Yo, a los pocos días hice algo que no había hecho por nadie en mi vida: compré un billete de avión y me presenté en su casa (avisándole primero) para demostrarle que realmente sí quería vivir con él, pero él me dijo que ya era tarde y que no se creía que realmente quisiera vivir con él, que yo sólo estaba ahí porque él había decidido terminar la relación y yo había espabilado. Que aunque me quería veía que era mejor terminar ahora porque más tarde iba a ser todavía más doloroso. Me dejó quedarme unos días en su casa, pero nada iba a cambiar para él.
No puedo entender cómo puede ser tan inflexible que ni aun viendo que estoy delante de sus narices, perdona, olvida y continúa la relación. Yo ya había estado todos estos meses imaginando la vida con él, me gustaba el pueblo, sus amistades, su casa, todo. Y me dolió ver como se rompía el mundo que ambos habíamos ido construyendo, pero que él no creyó que yo quisiera disfrutar.
Estoy destrozada porque le quiero muchísimo y para mí el amor es lo importante, con amor el resto de cosas se pueden suavizar o neutralizar, y me duele mucho ver cómo para él el amor que le he demostrado no es suficiente. Él tomó la decisión de romper la relación aun sabiendo que puede estar cometiendo un error ¿no sería más fácil darme la oportunidad para salir de dudas? pues no! para él las cosas son mejor como él las ha hecho y no quiere arriesgarse a comprobar nada porque no quiere que luego el sufrimiento sea más duro. No entiendo nada.
He leído las descripciones e historias sobre tauros que habéis escrito en el foro y la verdad es que parece que estén describiéndole a él. ¿Hasta qué punto es bueno que sea tan inflexible, rígido, testarudo y orgulloso? supongo que será la manera que tiene de protegerse, pero por otra parte hace mucho daño a la persona que le quiere tantísimo, en este caso a mí.
Es triste ver que no se ha terminado la relación porque le haya sido infiel o no quiera irme a vivir con él, ha terminado por actitudes orgullosas, malos entendidos y desconfianzas. Tan difícil es para un tauro escuchar nada más que lo que dice el corazón de la persona que le quiere? ...
Ahora he vuelto a mi pueblo, hace 6 días que estoy aquí intentando hacer la vida que ya había dejado para estar con él. Ya me había creado una rutina con él y se me parte el corazón al sentir que todo ha acabado.
Como os digo, no entiendo nada ...