OH! Virgen Purísima, llena de bondad y comprensión. Vos que sois la mejor intercesora ante la Divina Providencia, te ruego por medio de esta oración que ayudes a solucionar mi problema. Acordaos, oh, piadosísima Virgen Maria, que jamás se ha oído decir que ninguno de cuantos se han acogido bajo vuestro amparo, hayan implorado vuestra asistencia y dirigido sus suplicas haya sido abandonado. Animado yo con tal esperanza, acudo a Vos, oh Virgen de las vírgenes, y gimiendo bajo el peso de mis pecados, me postro a vuestros pies y os ruego me escuchéis (aquí indica tu petición). No desechéis mis suplicas oh Madre bondadosa, ante bien oídlas propicias y acogedlas favorablemente.
Reza esta oración con toda devoción y fe, ten plena seguridad de que tus problemas serán resueltos favorablemente para ti y tus familiares. Logrado tu pedido, publica esta oración tres días y adquiere la devoción de rezarla todas las noches.
Es muy milagrosa. Gracias.