Hola a todos y todas, soy nueva en este foro pero he leído mucho sus historias con parejas del signo virgo. Les cuento la mia. Hace 7 años conocí a un chico, desde el momento en que nos conocimos nos hicimos muy buenos amigos, él virgo y yo cáncer. Como todo buen virgo nunca me dijo nada, ni siquiera me insinúo que le gustaba un poco. Conocí a otro chico, me case y tuve un hijo, que por cierto tambien es de signo Virgo. Mi matrimonio duro 15 meses. Pasaron 3 años para que nuevamente volviera a encontrar a mi buen amigo. Salimos y de repente Oh sorpresa! nos besamos. Me asustó tanto, darme cuenta que lo que sentía por él no era simple amistad. Me dió tanto miedo que me escondí durante 6 meses, no lo quise ver más, no respondí sus llamadas. Lo encontre nuevamente después de ese tiempo, y ya tenía novia. Por nuestro trabajo coincidiamos en algunos lugares, y todo era como siempre, nuestra relación de amistad se mantenía, aunque el corazón me latía a mil cada vez que nos encontrabamos. Nunca hablaba de su novia, me contaba lo que iba a hacer, me llamaba, salimos algunas veces, y era inevitable terminar la cita con un beso. Aunque nos distanciabamos también por cuestiones de trabajo, siempre estuvimos pendientes uno del otro. Al inicio de 2006, me sorprendió al contarme que viajaba a otro país a sacar una maestría, se iba por un año y medio. Sentí que el mundo se me venía encima. Durante la despedida no llore frente a él, me pidio que tuvieramos un hijo, le dije que no. Que las cosas no debían ser así, porque no iba a estar con nosotros. Claro que no me embarace. Durante todo el tiempo que estuvo fuera, no hubo día que no dejara de pensar en él, intercambiabamos mails, y siempre me decía que me recordaba, y que le era difícil olvidar todo lo que habiamos pasado juntos. En julio de este año volvió, y lo primero que hizo fué buscarme. Desde entonces mantenemos una relación muy buena, muy fuerte, algo más parecido a una parja. Pero nunca me ha dicho que me quiere, se preocupa por mi y por mi hijo, que en muchas cosas se parece a él. Tenemos una conexión muy fuerte, que llega al extremo de pensar en él y recibir una llamada, un mensaje o un mail. Cabe mencionar que durante este tiempo, hemos conocido a otras personas, pero siempre terminamos juntos, y ahora despues de tanto tiempo, es mejor que antes. Espero les sirva de algo mi historia, y arménse de paciencia si de verdad aman a un virgo.