Por: Harumi Puertos
Noviembre ha transcurrido lleno de belleza en su contenido energético - espiritual. Todo un vaivén de energías que nos llevan del vacío a la expansión. Estas nuevas energías tienen que ver con quitarnos las máscaras para develar nuestra identidad, expresar nuestros sentimientos, pensamientos y deseos para poder avanzar más rápido para lo que sigue.
Durante este mes hemos sufrido desconexiones que tienen el propósito de llevarnos a un estadío de vacío. Es en el vacío donde se puede gestar lo nuevo y justo vamos saliendo de este estadío. El vacío nos ha dejado en un lugar muy cómodo, una zona segura donde parece no haber peligro y todo está en aparente quietud, un lugar donde no pasa nada aparentemente, pero está pasando todo pues muchas cosas se están removiendo internamente. El estadío de vacío es un lugar que nos indica que ya estamos en el lugar en el que debíamos estar, nos anuncia que hemos alcanzado niveles altos de armonía con el todo, nos indica que la búsqueda a terminado pues ya hemos llegado al lugar que teníamos que llegar y no necesitamos correr más pues no hay nada más que buscar por el momento. El sitio en el que nos hallamos es un lugar seguro, en donde el propósito es tener la armonía, la serenidad y el tiempo suficiente para poder reflexionar sobre nuestros pendientes, por eso es necesario hacer un alto momentáneo antes de comenzar con un nuevo capítulo en nuestra vida. Este tiempo de tranquilidad será el propicio para que muchas cosas se nos comiencen a revelar y podamos ver claramente el porqué de muchas cosas. Es aquí donde muchos velos se caerán y podremos ver claramente las cosas que no podemos permitir más en nuestra vida y también podemos ver con que nos quedamos y con que seguimos. Dentro de la serenidad y calma de este momento, habrán momentos difíciles pues cuando los velos se caen, también vemos nuestra realidad tal cuál es y esto puede ser difícil, sobre todo, cuando la realidad nos revela que tenemos que poner acciones y soluciones a las cosas. Estamos en uno de los momentos más importantes del año pues esto implica por fin MOSTRARNOS SIN MÁSCARAS y DEFENDER LO NUESTRO además de DELIMITAR y poner FIN A LO QUE NOS DAÑA. Esto abarca mucho. No solo te verás ante relaciones destructivas, carentes de amor, también te verás en un trabajo que ya no puedes sostener, en una casa que nunca deseaste o tal vez una ciudad que no puede darte más. A grandes dimensiones, también podrás ver el daño que te han hecho a ti y a tu sociedad los grandes grupos religiosos y políticos, las estructuras económicas y sociales que han sostenido nuestra sociedad en base al miedo y la culpa. PODRÁS VERLO Y NO PODRÁS SOSTENERLO MÁS, podrás verlo y no podrás COLABORAR MÁS CON ELLO. Estamos hablando del efecto de las energías, estamos hablando del cambio de conciencia a nivel colectivo. Estamos diciendo que muchas personas estarán en el mismo canal y estarán pasando por el mismo enfrentamiento. A nivel social, esto es muy importante pues implica el no poder sostener más las viejas estructuras que nos han limitado como seres humanos.
El siguiente capítulo no solo nos revelará nuestra realidad, sino que también nos revelará claramente quiénes somos y que queremos y esperamos de la vida. Este enfrentamiento puede ser difícil de digerir pues veremos con dolor que el entorno que nos rodea, es justo lo contrario a lo que deseamos y no coincide con nosotros, que siempre lo tuvimos y que siempre lo permitimos, pero ahora ya no es tiempo de permitir, sino de poner límites y de aceptar de la vida, solo que nos corresponde por afinidad. Será momento de quitarnos la máscara y presentarnos al mundo tal como somos, pues solo así, podrán manifestarse en nuestro entorno lo que resuene con nuestra energía actual. Dejar de fingir que las cosas están bien. Dejar de fingir que somos felices. Dejar de fingir que somos lo que NO somos. Si nosotros nos empeñamos en encubrir nuestra identidad, la vida nos seguirá dando más de lo mismo y esto nos causará más dolor de lo acostumbrado, pues ahora ya no tenemos una venda que nos cubra, ahora ya la veremos claramente y ver lo que nos hace daño, chocará mucho en nuestro interior si lo seguimos aceptando.
La caída de los velos marcará un antes y un después en este momento, pues a partir de que sintonicemos con esta nueva frecuencia y comencemos a realizar cambios en nuestra vida, se abrirán nuevos capítulos donde la acción y la manifestación serán aceleradas, rápidas e intensas pues sin las limitantes de las apariencias o máscaras, el avance será a pasos agigantados, pasos acelerados llenos de fuerza, pasión y verdad. Pasos coherentes con nuestra nueva forma de pensar, de ser y accionar. Coherentes con el SER que no permitíamos que saliera a la luz, pero que hoy en día resulta imposible mantenerlo en la obscuridad pues comienza a brillar con luz propia.
Les mando un abrazo lleno d luz, como un arcoiris, las quiero