El Coco, ese ser al que le encanta asustar a los niños que no se quieren dormir. Tiene predilección por aquellos niños que no obedecen o se portan mal. Al Coco le gusta esconderse en las habitaciones de los niños mal educados, también en sus armarios, en los cajones o debajo de la cama, en cualquier sitio con tal de poder asustarlos por la noche.
También hay otro tipo de Coco que aparece en las noches que no hay luna. Este coge a los niños mentirosos y los pone en una bolsa para hacer con ellos jabón. Cuando un niño hace algo malo, debe disculparse y aceptar el castigo que le pongan sus padres, sino el Coco vendrá a verlo. Esa es la única manera de salvarse del Coco.
El aspecto que tiene el Coco varia en cada lugar, puede ser de forma fantasmal y con una cabeza con tres agujeros, dos para los ojos y uno para la boca. Su nombre también puede variar en cada lugar.
En algunos sitios se le llama “El hombre del saco”, en España, o “El pequeño hombre, en Bahamas, en Bulgaria le llaman “el terrible torbalan”. En noruega y Dinamarca “el bussemanden”, en Finlandia “el morko”. En la republica checa y Polonia es llamado “bubak. En Alemania “el negro”. Tiene multitud de nombres, pero es el mismo ser, la causa de que los niños no puedan dormir por las noches.